La Catedral de Murcia: Una pieza magistral del barroco

Más de 400 años, extendiéndose entre los siglos XIV y XVIII, fueron empleados para completar finalmente este intrincado e imponente edificio. Al contemplar la magnífica arquitectura barroca a medida que uno se va acercando a la catedral de Murcia, resulta fácilmente comprensible que esta represente la atracción turística más importante de la ciudad.

También conocida como la Catedral de Santa María, el edificio es mucho más que un elemento arquitectónico. Además de una arte barroco, en el interior de la catedral podremos encontrar varios estilos de arquitectura predominantes a través de las épocas, estilos que se han utilizado a lo largo de los años para completar esta estructura espectacular. El comienzo de una obra maestra. El exterior original de la Catedral fue reconstruido entre 1394 y 1465, en el sitio de lo que originalmente fue una mezquita. Con el paso de los años, se restauraron partes del edificio y se agregaron extras como el campanario, la Capilla de Vélez y la Capilla de Junterón. Aunque el interior es principalmente gótico, la catedral también contiene secciones de arquitectura neoclásica y renacentista. Situado en la Plaza Cardenal Belluga, todo lo relacionado con el edificio, por dentro y por fuera, es impresionante.

El magnífico campanario, que reemplazó al minarete de la mezquita, tiene una altura de más de 90 metros y se puede ver desde toda la ciudad. Sus 24 campanas tienen nombres individuales y suenan diariamente para llamar a los católicos fieles a la oración. Dentro de la catedral, los diversos estilos arquitectónicos se identifican fácilmente.

Disfrute de un recorrido por sus tres naves, sus veintitrés capillas y sus pisos de mosaico. Pasee por los claustros, admire la Capilla Junterones y visite el museo de la catedral, sus obras de arte y una sección de los cimientos de la mezquita original.

La catedral de Murcia es mucho más que un lugar de culto. España es conocida por su gran número de fiestas religiosas nacionales y locales, y Murcia y su catedral hacen su parte en estas. La catedral está bañada por un magnífico espectáculo de luz durante la semana de Navidad. Las procesiones y los festivales se celebran durante todo el año, y la música y los conciertos llenan de sonido la plaza de la catedral durante los meses de verano, promoviendo la zona como centro principal del calendario religioso y social de Murcia.

En su próxima visita a la ciudad de Murcia, tómese un tiempo y diríjase a la Plaza Cardenal Belluga. Las puertas de la catedral están abiertas durante la mañana, nuevamente durante la tarde y el domingo por la mañana. Tómese su tiempo, vea la catedral desde todos los diferentes enfoques y no se olvide de subir al campanario para disfrutar de las espectaculares vistas de la ciudad.